Experimentos con globos

Tenemos desde hace tiempo un globo aerostático en la oficina de Basurama. Todo empezó con una llamada de un amigo, Daniel Villalonga, quien había encontrado un globo aerostático viejo en Igualada y necesitaba que alguien lo trajera a Madrid. Aprovechando que nosotros estábamos haciéndo un proyecto en Manresa pasamos por allí y lo trajimos.

Los aproximadamente 200kg de tela han estado tirados en una esquina de nuestra nave hasta que el otro día otro amigo de la casa, Juan, nos contó como el que no quiere la cosa que trabajaba en una empresa de viajes en globo que está cerca de Villanueva del Pardillo. Rápidamente nos ofreció llevar el globo para allá e hincharlo. No con helio, sino con un ventilador, que es como más tarde aprendimos que comienza el proceso de hinchado de un globo aerostático.

Todos teníamos muchas ganas de ver ese trasto hinchado, queríamos saber qué volumen tenía, de qué estaba hecha la tela, cómo se hinchaba aquello… en definitiva, qué posibilidades de reutilización tenía.

No somos los primeros que piensan en hacer arquitectura con estructuras hinchables, hay grandes referentes como José Miguel Prada Poole o más recientemente la gente de raumlabor.

Instant city, de José Miguel Prada Poole. 1971.
Das Küchenmonument. raumlaborberlin, 2006.

Finalmente hace un par de domingos fuimos para allá. En una increíble mañana de otoño sacamos por fin la tela del saco para descubir que nuestro globo era una enorme carta de ajuste. El espacio interior era más increíble aún, con todas las líneas fugando a un punto por encima de la línea del horizonte, estar hay dentro producía una curiosa sensación de desorientación.

Paaq, el de Obsoletos, grabó un video de todo el proceso.

[vimeo]http://vimeo.com/16279579[/vimeo]

Un agradecimiento para la gente de The Balloon Company, que nos dejó usar su material y nos ayudó con este experimento.

La basura de los Reyes Magos

Ayer, paseando por Madrid, saqué unas pocas fotografías de los contenedores de basura, a ver qué habían traído los Reyes:

Junto a mi casa, mezclado con envoltorios anónimos, encontré un fantástico Mickey Mouse Clubhouse arriba, y abajo una muñeca de marca anónima con su espejo y demás complementos.

En la calle Fuencarral había otro Mickey Mouse Clubhouse (debe haber sido uno de los juguetes de moda estas navidades) y un coche teledirigido Dominator 3.

Y en un parque de Chamberí mi hallazgo favorito: unos palos de golf. Claro, viviendo en Chamberí uno no puede perder la oportunidad de ir a jugar al campo de golf.

La basura del futuro. ¿O es la del pasado?

Voy a empezar con un poco de historia de Basurama:

Las primeras ediciones del Festival Basurama tenían un subtítulo o temática especial, o al menos eso intentábamos con títulos como «eres lo que tiras» o «desecho y supervivencia». Pues bien, la cuarta edición la titulamos «basura del futuro» y quisimos hablar de la basura digital, el spam, el tiempo dedicado a leer emails, etc.

Al final el tema nos pasó por encima. Quizás era pronto para nosotros, o a lo mejor era pronto para un mundo que en cuatro años ha cambiado tanto: XP era el sistema operativo por excelencia con un Internet explorer que se comí­a el mercado, google era un buscador, nadie hablaba de la web 2.0 o las redes sociales… creo que era pronto para los dos.

Y me he acordado de todo esto porque Microsiervos comentó ayer un informe del estado de la blogosfera, publicado por Technorati. Entre otros muchos datos, el informe cuenta que de los 133 millones de blogs que tiene contabilizados, sólo 7 millones han publicado algo en los últimos 6 meses, es decir, un 5,5%.

No estoy seguro de cuando se puede declarar un blog oficialmente muerto, pero si consideramos que un 94,5% de ellos lo están, ¿son basura?

  • Sí, es información ocupando espacio en un servidor.
  • No. ¿Quemarías un libro sólo porque alguien ha acabado de escribirlo?

No sé que pensar aún, pero este informe tiene todo el aspecto de ser la punta de lanza de un debate que irá teniendo cada vez más importancia.

De paso, sirva esta anotación para que no den este blog por muerto.

Actualización: el informe habla también de la gran cantidad de blogs spam… ¿Y si han contado el nuestro como uno? A fin de cuentas debe entrar muchísima gente engañada por el título.

¡A goooosar!

Zapato que yo me he puesto
y lo boté al basurero

Zapato que yo me he puesto
y lo boté al basurero

Viene otra y lo recoge
yo me lo puse primero

(Bemba colorá. Fania All-Stars. Minuto 7.53 en el video)

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=vDwSFpV9IeU[/youtube]

En algunas ocasiones (no siempre) Celia Cruz cantaba estos versos en la parte «improvisada» de la canción. Me pregunto si hací­an alusión a su exilio de Cuba…

En fin, recuerdos para los que están todavía por las Américas. A ver si nos cuenta pronto qué tal por México.

Nota: lo siento por lo perro del video. Si te gusta la salsa merece la pena que veas esta otra versión con todo el sabor (¡saaaaabor!) de los 70, aunque sin los consabidos ripios.

Tú tira que nosotros nos hacemos cargo

Patricia, una amiga de Basurama nos ha enviado una noticia publicada en elmundo titulada así: La basura electrónica europea ‘envenena’ los países en desarrollo.


Anda chaval, no disimules que en África hemos encontrado teclados con la ‘Ñ’

Cabe preguntarse cómo es posible que esto suceda si tanto la Unión Europea como España cuentan con sus propias leyes y directivas que rigen la gestión de todo tipo de residuos, electrónicos y no electrónicos…

…o bien puedes pensar que estas mismas leyes son las que explican por qué existen paisajes como los que Juan trae de vez en cuando por aquí­.

En fin, esto no hace más que corroborar una teoría que manejamos los de Basurama y que más o menos podríamos enunciar así:

Cuando una ley no está acompañada del necesario apoyo económico y social lo único que se hace es transladar el problema a otro sitio y permitir que alguien se aproveche de la situación.

Vale, no me ha quedado como para publicarla en un libro de derecho pero creo que se entiende fácil. En este caso concreto de la basura electrónica resulta que España y Europa imponen unas reglas a las empresas para que se hagan cargo de la basura que producen. Hasta ahí perfecto: si me vais a vender un teléfono móvil lleno de cosas que contaminan a saco y que dentro de (con suerte) dos años va a dejar de funcionar haceros cargo vosotros del cadáver. Claro que si una vez hecho esto no vigilas lo que las empresas que gestionan los residuos electrónicos hacen, lo único que conseguimos es alejar el problema. Si no lo veo no existe, ¿no?

El caso es que esto ha sido siempre así, me temo. Mientras leía el artí­culo se me han ido ocurriendo otros ejemplos. A lo mejor os parecen un tanto locales, pero como sabemos que sois muy listos seguro que sabréis extrapolar.

1. Plan Castro, 1860. Nuestro amigo Carlos María de Castro recibe el encargo de Isabel II para planificar el ensanche de Madrid. Además de las normas urbanísticas que rigen en la zona planificada, todo el suelo construible dentro del perí­metro del ensanche estaba sujeto a un impuesto. Así­ que, ¿qué crees que hicieron los más avispados? Pues irse a construir en los terrenos que quedaban fuera del ensanche y que no estaban sujetos a impuestos. De ahí el curioso paisaje del barrio del distrito de Tetuan, por ejemplo.


Adivina dónde acaba el ensanche…

2. Triball y la plaza de la Luna. Los vecinos de la zona de la plaza de la Luna en Madrid llevaban años quejándose por las prostitutas y yonkis que habitaban en la plaza. Tras años de quejas y micromanifestaciones el Ayuntamiento decide poner orden y echar a estos ‘peligrosísimos’ personajes. A día de hoy son los vecinos de dos calles más allá los que se manifiestan por la presencia de prostitutas y yonkis, que obviamente no se han volatilizado, mientras que un personaje más peligroso se han instalado en la zona bajo el discurso de la modernización.

Así­ que ya sabéis, queridos amiguitos, ¡iros con vuestra basura a otra parte!

Proyecto Obsoletos

En primicia para los lectores del blog de Basurama, os presentamos un nuevo proyecto que estamos empezando a desarrollar. Se llama Obsoletos y el objetivo es investigar y difundir soluciones creativas a partir de basura de origen tecnológico: ordenadores viejos, videos VHS, televisores… todo vale.

Para este proyecto contamos con la colaboración de El club del ocio (Paaq y Cogollo) y Skot Pérez de meipi.org, quienes están desarrollando los contenidos del proyecto.

Currando en el estudio

A partir de octubre empezaremos a realizar talleres y otro tipo de actividades en diversas universidades y centros culturales. Por ahora os podemos confirmar que seguro que va a haber unos talleres en la Facultad de Físicas de la UCM el próximo curso.

Como nuestros queridos colaboradores son muy locuaces y tienen muchas cosas que contarnos, hemos abierto un nuevo blog, obsoletos.org donde estamos volcando todas las ideas, pensamientos y soluciones que van surgiendo.

Si quieres saber que es lo que entendemos en Obsoletos por hackear, cómo convertir un viejo disco duro en un altavoz o cómo montar un ordenador de un modo más divertido pásate por el blog.

Y de paso, y como este proyecto está subvencionado por el Ministerio de Cultura, hemos decidido publicar el presupuesto y contaros en qué nos vamos gastando el dinero. ¿Que te parece que se puede gastar mejor? Pues entra y déjanos un comentario.

¿Qué es lo más curioso que habéis encontrado en la basura?

Ha llegado a nuestras manos un catálogo de la exposición Bombay Sapphire ‘Design Exhibition’, comisariada por Javier Mariscal. La exposición es más o menos una selección de diseños que han pasado a la historia, casi todos archipublicados y archiconocidos. El catálogo no tendría mayor interés para nosotros de no ser por este objeto, de nombre Uten.silo:

utensilo_mariscal

Se trata de un mueble para ordenar cubiertos y otros instrumentos de cocina, diseñado por Odrote Becker e Ingo Maurer en 1969. Lo mejor de todo es lo que Mariscal escribe de este objeto:

«Muchos de los que nos compramos esta pieza en los setenta, la arrinconamos en los noventa, y ahora nos gustaría saber en qué contenedor la tiramos o en qué desván la abandonamos para recuperarla, para volverla a colgar en la pared de nuestro estudio y poder despejar por fin la mesa. Porque en ella cabe de todo, porque todo está a mano y ordenado. Porque es irrompible, porque nunca ha pasado de moda, porque es un derroche de sentido común.»

Debe ser cierto lo que dice porque nosotros en su día nos encontramos un ejemplar tirado en la basura, aunque hasta ahora (al menos yo) no sabíamos que fuera un «objeto de diseño».

En fin, Javier, muchas gracias por propiciar esta historia que nos va a permitir responder a la dichosa pregunta de qué es lo más curioso que nos hemos encontrado en la basura, que tanto nos hacen. En serio, mil gracias, pero no nos pidas que te devolvamos el mueble, que no vamos a hacerlo. Es superútil.

utensilo_basuram�stico

De visita por el barrio de Santa Cruz.

Que nada tiene que ver con el barrio de Salamanca o Barrio Sésamo.

En Venezuela llaman barrios a las agrupaciones de viviendas autoconstruidas, generalmente situadas en las colinas y cerros de la ciudad. Después de unos pocos viajes a diferentes ciudades de Latinoamérica, La Habana, Sao Paulo, Caracas o Bogotá, uno llega a la conclusión de que la imagen de la pobreza es igual en todas partes.

Cada ciudad tiene una idiosincrasia diferente que le da un aspecto diferente: mejores o peores infraestructuras que las hacen más o menos caóticas, mejores o peores planes urbanísticos que permiten edificaciones más o menos altas y espacios públicos de mejor o peor calidad, mejores o peores políticos que… bueno ya sabéis de que son capaces los políticos.

Sin embargo las zonas pobres de todas estas ciudades son iguales. Casitas de ladrillo y algo de hormigón, en algunos casos pintadas de colores alegres. Situadas en colinas que nadie quiso ocupar, entre otras cosas porque la lluvia convierte estos lugares en una especie de lotería donde, si te toca, tu casita se cae por la ladera.

Y la música que suena por las calles. Ritmos binarios machacones, bases electrónicas, voces distorsionadas…

Pues en uno de estos barrios (uno de los más densos de Latinoamérica, según nos dijeron), estuvimos paseando. Guiados por Juan Pacheco, uno de los lí­deres de la comunidad y acompañados por Tatiana y Mónica, arquitectas de la Alcaldía de Baruta.

Nada que os contemos es semejante a la experiencia de caminar por las calles del laberinto hiperarrabalesco que es un barrio. La densidad del espacio construido es tal que cualquier esquina es susceptible de ser utilizada como espacio público. Por el camino encontramos canastas de balocesto, máquinas de gimnasio y basura. Mucha basura.

Desde aquí­ os aconsejamos que no os internéis en un lugar de este tipo sin compañía de alguien con autoridad. Incluso con compañía podéis acabar siendo presa de los malandros, como casi nos pasó a nosotros. Cuatro chavales armados con pistolas dispuestos a sacarnos hasta los ojos.

Por cierto, el precio de una pistola en Caracas ronda los 1.140.000 «bolos», unos 460€ al cambio oficial o 155€ al cambio paralelo. La mayoría de origen belga, aunque también italianas, españolas y ultimamente rusas. Baratito.

[youtube]http://youtube.com/watch?v=0-Q1n7eGw4M[/youtube]

Os dejamos con un partido de baseball en Santa Cruz.